Con la llegada del verano, los humanos no somos los únicos que acusamos el aumento de temperaturas. También lo hacen esos animales que forman parte de nuestra familia. Si para nosotros es poco llevadero, para ellos puede llegar a ser insoportable por el manto de pelo que les acompaña. Algo que, en el caso de los canes, podemos resolver ofreciéndoles helados para perros. Una forma maravillosa y deliciosa de refrescarles.
Incluso si somos estrictos con la alimentación para perros del nuestro ¡podemos hacer una excepción en verano! Y es que no hablamos de darles cualquier cosa sino, más bien, de tener presentes recetas de helados para perros sanas y equilibradas para ellos. Unas que podemos elaborar con suma facilidad y que supondrán un mimo que nuestro amigo peludo agradecerá.
Y es que los perros, por su carácter, suelen estar abiertos a probar cosas nuevas. De ahí que merezca la pena preparar estos helados para perros que son, mucho más que eso, una manera genial y divertida de ayudarle a sobrellevar el calor. Una forma, además, de innovar más allá de su cuenco de agua fresca o comida húmeda.
Y es que, igual que nosotros nos damos licencias en esta época del año, nuestro perro también se las merece. Una manera sencilla de que, como nosotros, disfrute del verano.
POR QUÉ PREPARAR HELADOS PARA PERROS AL NUESTRO
A diferencia de otros animales como los gatos, los perros sí disfrutan de los alimentos fríos. Por eso, tomarnos un ratito para hacer helados para perros puede ser una maravillosa manera de hidratarles en los días de calor veraniego. Está claro que como el agua no hay nada, cierto. Pero también está claro que, a veces, podemos consentirle estas pequeñas licencias para paliar el calor. Algo clave para no tener que vernos en el caso de identificar los síntomas del golpe de calor. El peor enemigo de nuestro amigo peludo en esta época del año.
Añadido, los helados para perros pueden darnos mucho juego. Y decimos esto porque pueden ser, en sí mismos, un entretenimiento pero también una herramienta de premio para él. A diferencia de otros alimentos que pueden ser engullidos en apenas un par de mordiscos, en el caso de los helados no será tan rápido. El perro tendrá que ir consumiéndolo lametazo a lametazo, por lo que si tenemos un perro muy demandante será también una buena manera de que prescinda de nuestra compañía por un ratito.
Es más: podemos hacerlos, incluso, de un tamaño que quepa dentro de un kong o de cualquiera de los juguetes para perros. Una forma de hacer todavía más entretenido su disfrute.
Es importante desterrar por completo la idea de darle helados comerciales. Sí, de esos que los humanos consumimos con total tranquilidad durante esta época del año. Si bien a nosotros nos sientan estupendamente, no sucede lo mismo en el caso de los canes. Habitualmente los azúcares, conservantes y otros ingredientes pueden provocar que nuestro perro sufra un cuadro de diarrea, vómitos o, incluso, una subida de azúcar. Una buena razón para no dárselos y evitar, así, que el animal pase por un momento desagradable.
Por estas razones, lo ideal es que seamos nosotros mismos quienes preparemos nuestros propios helados para perros. Una forma de velar porque los ingredientes sean siempre aptos para él. La mejor manera, en realidad, de garantizar que no solo le estamos dando una golosina sino que, también, es buena para él.
4 PROPUESTAS DE HELADOS PARA PERROS
Conocidas las ventajas de elaborar nuestros propios helados para perros, veamos una más: la increíble facilidad de hacerlos en casa. Para empezar, porque no necesitaremos un gran despliegue ni de accesorios de cocina. Será suficiente con un molde de helados para congelador y una batidora. Y, para seguir, porque los ingredientes son igual de accesibles: forman parte de nuestra rutina doméstica.
Así, veamos cuatro recetas para hacer helados para perros y sorprender al nuestro.
1. Helados para perros de yogur
¡Un auténtico clásico de los helados para perros que, además, puede improvisarse aunque tengamos la nevera prácticamente vacía! En el caso de estos helados, podemos incluso utilizar como molde el propio envase. En la elección del yogur, lo ideal es que optemos por uno desnatado y natural. Sin sabores añadidos ni azúcares. Si, por algún motivo, no somos amantes de darle mucho yogur a nuestro perro podemos rebajar la mezcla: mitad yogur, mitad agua.
Dado que el yogur admite casi cualquier cosa, podemos mezclarlo con algunas de las frutas que son beneficiosas para los perros: frambuesas, fresas, melón o sandía le darán un toque dulce sano y delicioso.
Y si tenemos canela a mano, tampoco está de más añadir una pizca. Es sumamente beneficiosa para los canes por sus propiedades antifúngicas pero, también, antiinflamatorias. Y, encima, ¡hará que el helado les llame más todavía la atención!
2. Helados para perros de comida
Aunque a nosotros la sola idea de pensar en un helado de comida nos estremezca ¡a él le encantará! Está claro que el gusto canino es menos exigente que el nuestro en muchos aspectos, por lo que este tipo de helados para perros puede ser bueno para nutrirle y, de paso, refrescarle. Un gran ayudante, sobre todo, si nuestro perro está desganado con motivo del calor.
Pollo, ternera, salmón, buey o cualquier otra fuente de proteínas son susceptibles de ser ingredientes de este tipo de helados. Lo único que hay que tener claro es que, sea de lo que sea, tendremos que mezclarlo con algún líquido. En este caso, el yogur queda descartado. Podemos decantarnos o bien por un caldo de carne o bien por agua, como prefiramos o podamos en ese momento.
En el caso de los helados para perro de pollo, podemos hacer un guiso específicamente para ello. Así, aprovecharemos el caldo y parte de la carne libre de huesos. Con un golpe de batidora y otro de congelador lo tendremos listo.
Pero si no queremos complicarnos tanto la vida o no disponemos de mucho tiempo para cocinar, podemos aprovechar la comida húmeda para perros. Bastará con mezclarla con un caldo si lo tenemos, o en su defecto rebajarlo con agua.
3. Helados para perros de frutas
¡Uno de los helados para perros que más les gustan! Aunque la fruta no forma parte de la dieta habitual del perro, sí es beneficiosa en dosis controladas. Aporta fibra y un sinfín de vitaminas más que positivas para nuestro animal. Plátano maduro, manzana, pera o frutos rojos pueden combinar a la perfección con frutas tan veraniegas como el melón o la sandía.
Para este tipo de helados, podemos optar por dos versiones diferentes: o bien mezclarlas con yogur, o bien hacer nuestros helados para perros con su zumo. ¡Nada como ir probando diferentes cosas hasta ver qué es lo más le gusta a él! Eso sí: en su elaboración, tendremos que ser cuidadosos de retirar las pepitas y centros de las frutas.
4. Helados para perros de galleta
Y nuestra última receta de helados para perros es igual de sencilla que las anteriores. Aprovechando las galletas que tengamos de él o, en su defecto, galletas naturales; podemos hacer una golosina rica y sana. Una precaución: importante evitar las galletas industriales que, como los helados, suelen ser ricas en azúcares y mantequillas. Dos enemigos de la salud de nuestro perro.
Para hacer helados para perros de galletas, también tendremos que recurrir al yogur. Y, ya sea dejándolas en trozos para que se entretenga encontrándolas o batiéndolas para que la mezcla sea más uniforme, nuestro peludo disfrutará increíblemente de su sabor.
Cuatro recetas de helados para perros sencillas y deliciosas para hacerle saborear el verano. ¿Te animas a hacérselas al tuyo?