Adorables, con un punto canalla y con muchísima personalidad. Tener un gato es sinónimo de descubrir a uno de los animales más fascinantes que existen. Quizás por eso, es una de las pocas especies que cuenta con el Día Internacional del Gato en el calendario. Una celebración que no es la única ya que estos felinos tienen dos fechas más en propiedad: el 8 de agosto y el 29 de octubre.
Y si ya esto es curioso de por sí, más lo es saber por qué el 20 de febrero se conmemora a nivel mundial. La fecha honra la muerte de Socks, el felino más influyente de los últimos dos siglos. Habitante de la Casa Blanca durante el mandato de Bill Clinton, su fama era tal que, incluso, aparecía retratado en las fotos oficiales.

Más allá de la anécdota, la conmemoración del Día Internacional del Gato tiene otro sentido mucho más importante. Y es que esta efeméride busca dar visibilidad y protección a uno de los animales más castigados de la historia. Un buen motivo para conocer cómo se le ha tratado a lo largo de los siglos.
- DE ANIMAL SAGRADO PARA CELTAS O EGIPCIOS, A ESPECIE REPUDIADA: SU CAMINO EN LA HISTORIA
- 1. El gato, animal sagrado para los egipcios
- 2. Amado y odiado por los celtas
- 3. Una herramienta, el papel de los gatos en la antigua Grecia
- 4. Compañero de soldados en la antigua Roma
- 4. La veneración asiática, una máxima de China y Japón
- 6. La demonización de la Edad Media
- 10 CURIOSIDADES PARA CONMEMORAR EL DÍA INTERNACIONAL DEL GATO
- 1. El gato, el último animal domesticado por el hombre
- 2. Su nariz es como la de las serpientes ¡pero no es en lo único que se parecen!
- 3. Cuentan con un oído extremadamente fino y prefieren las voces femeninas
- 4. Más huesos que nosotros y un cerebro muy parecido
- 5. Un año de su vida equivale a seis de la nuestra
- 6. La huella dactilar del gato es su nariz
- 7. Un gato tricolor es (casi) siempre hembra
- 8. Los bigotes del gato no son pelos
- 9. Los gatos también pueden ser «candigatos» políticos
- 10. Son uno de los animales con mayor tasa de abandono, germen de la celebración del Día Internacional del Gato
DE ANIMAL SAGRADO PARA CELTAS O EGIPCIOS, A ESPECIE REPUDIADA: SU CAMINO EN LA HISTORIA
Definir a un gato resulta prácticamente imposible, por más que conozcamos las claves para entender el carácter del gato. Curiosamente, sucede algo parecido en lo que respecta a cómo ha sido el papel de este animal a lo largo de la historia. Y es que, a pesar de haber sido siempre protagonista de la historia del ser humano y protagonista de múltiples leyendas ligada a lo sobrenatural, hemos pasado de odiar a amar a este animal indistintamente a lo largo de los siglos y las culturas.
Veamos algunos de los momentos cumbre de la historia del gato a lo largo del tiempo.
1. El gato, animal sagrado para los egipcios
El antiguo Egipto veneró y rindió pleitesía a la figura del gato. Aunque el león era en origen su animal sagrado de referencia, el gato se impuso como divinidad tres siglos antes de Cristo por ser más dócil. Quizás por eso en el imaginario del antiguo Egipto existía la diosa, símbolo de la fecundidad y la belleza, que se representaba con cabeza de gato y cuerpo de humana. Una diosa que encarnaba la misma dualidad que el carácter de nuestros felinos domésticos: por un lado, el calor y la luz; por otro, el misterio y la noche.
Protegidos por el Faraón hasta el punto de que quien dañara a un gato se enfrentaba a pena de muerte, incluso para despedirlos se les rendía pleitesía. El funeral de un gato se realizaba con honores de estado y la familia a la que pertenecía guardaba incluso luto.
2. Amado y odiado por los celtas
Entre los celtas, el gato tenía dos papeles muy distintos. Para algunos, sus ojos eran una entrada directa al reino de las hadas y les atribuían poderes hasta el punto de ser considerados los guardianes del «otro mundo». Un motivo para que muchos de estos maravillosos animales fueran sacrificados para utilizar partes de su cuerpo en distintos rituales. Siempre se sacrificaba un gato negro y siempre también macho.
Por ese mismo cariz mágico, para muchas personas la presencia de un gato era sinónimo de que el diablo estaba cerca. Es más: se celebraron juicios de brujas a quienes tenían un gato doméstico.
3. Una herramienta, el papel de los gatos en la antigua Grecia
Los gatos en la antigua Grecia tampoco corrieron mejor suerte. Para este pueblo eran únicamente un medio efectivo para desratizar. Comenzaron a criarlos y venderlos a galos, egipcios y celtas. Algo que debemos agradecerles ya que, así, el gato se expandió por toda Europa.

4. Compañero de soldados en la antigua Roma
En la Roma de la época, el gato era inicialmente un símbolo de poder. Solo las familias adineradas podían tener uno y la finalidad era conjugar la compañía con su carácter cazador. Sin embargo, con el paso del tiempo, incluso llegó a acompañar a los soldados romanos en sus misiones más allá de la actual Italia.
4. La veneración asiática, una máxima de China y Japón
Para compensar esta falta de aprecio europeo, el gato ha gozado a lo largo de los siglos del cariño y la admiración de los pueblos asiáticos.
Mientras para la China antigua eran el símbolo de la fortuna y la paz, a pesar de que solo las mujeres podían poseerlos ya que se les tachaba de poder atraer la mala suerte y de alejar los malos espíritus; para el Japón de entonces eran un símbolo dual. Por una parte encarnaban la fortuna, la sensualidad y el deseo; por otro, podían ser maléficos y, por eso mismo, era necesario mimarlos.
Tanto fue así que, de aquella, Japón vivió una superpoblación de ratas porque tal era el mimo con el que trataban a sus animales para evitar a los malos espíritus que dejaron de cazar.
6. La demonización de la Edad Media
Quizás una de las épocas más oscuras de la historia del gato. Durante la Edad Media fueron considerados criaturas demoníacas y compañeros inseparables de las brujas. A esa reminiscencia celta que se agravó en esta época hemos responde la superstición de los gatos negros.
Durante esta época de la historia y por su simbología mística, los gatos vivieron una auténtica persecución. Solo con la llegada de la peste negra que causaron las ratas en el siglo XVII fue posible volver a mirarlos como lo que son: animales que nos acompañan.
10 CURIOSIDADES PARA CONMEMORAR EL DÍA INTERNACIONAL DEL GATO
No se nos ocurre mejor forma para celebrar el Día Internacional del Gato que con curiosidades, una de las características de este animal, sobre su especie. Unas que nos ayuden a entender mejor sus peculiaridades e, incluso, a conocer mejor por qué son uno de los animales de referencia para la Humanidad.
1. El gato, el último animal domesticado por el hombre
Según cuenta la ciencia, el gato apareció en la Tierra antes que el perro y otros animales. Pero a pesar de llegar primero, ha sido la última especie en ser domesticada por el hombre. ¡Y esto todavía tiene sus matices! Cualquier humano que comparta su vida con un minino sabe que domesticar un gato no es una tarea que pueda darse por concluida.
Es más: la sensación habitual es que son ellos quienes nos domestican a nosotros. ¡Nada como preguntarle a quien haya intentado educar a un gato para creerlo!
2. Su nariz es como la de las serpientes ¡pero no es en lo único que se parecen!
A nivel biológico, los gatos comparten una rareza con las serpientes. Nos referimos al órgano de Jacobson: un órgano auxiliar del sentido del olfato situado entre la nariz y la boca. Gracias a él, el olfato de un gato es mucho más preciso. Saber esto nos hace entender el motivo por el que, en ocasiones, un gato permanece con la boca abierta. No es otra cosa que para afinar su olfato.
Pero no es esto lo único que comparten con las serpientes. Al igual que ellas, los gatos también emiten un silbido cuando se creen en peligro. Un mecanismo con el que pretenden hacerle saber a un posible depredador que pueden ser una amenaza.
3. Cuentan con un oído extremadamente fino y prefieren las voces femeninas
Si alguna vez te ha sorprendido despertar a tu gato con un ruido ínfimo, has de saber que tiene toda la lógica. La capacidad auditiva de un gato es infinitamente mayor que la del ser humano. Mientras nosotros solo podemos oír hasta 20 kHz, ellos escuchan hasta los 64 kHz. De ahí que los sonidos fuertes y los estruendos les provoquen pavor.
Además de sus tímpanos, los gatos cuentan con unas orejas predispuestas a escuchar. Cada una de ellas tiene 36 músculos que les permiten orientarlas, juntas o por separado, hacia el sonido. ¡Y giran 180 grados!
Por si esto fuera poco curioso, una peculiaridad más: los gatos prefieren las voces de mujer. Por eso, suelen obedecer mejor a las féminas. Y no: no se debe a una predilección personal de ellos sino, únicamente, a su oído. Al tener voces más agudas, las perciben mejor.
4. Más huesos que nosotros y un cerebro muy parecido
El cuerpo del gato es una auténtica obra de ingeniería natural. Y decimos esto porque encierra grandes misterios, como que todos los gatos nacen con los ojos azules. Lejos de hacer un tratado veterinario, queremos resaltar algunas diferencias y parecidos con los seres humanos.
Empecemos por aquello en lo que somos distintos. Para empezar, en el número de huesos. Mientras nosotros tenemos 206, el cuerpo del gato está compuesto por 230. Y no solo en eso nos ganan. Nuestras fosas nasales cuentan con cinco millones de terminaciones nerviosas. Algo que nos deja en pañales comparado con los 19 millones que pueblan la nariz de un gato.
Y si las diferencias son singulares, no lo es menos la similitud. Y es que el 90% del cerebro de un gato es igual que el nuestro. Es más: es mucho más parecido que el del perro, y solo superado por especies tan próximas al hombre como el mono o el ratón. Sí, has leído bien. ¡Algo más para descubrir en el Día Internacional del Gato!
5. Un año de su vida equivale a seis de la nuestra
Longevos por naturaleza sobre todo si somos cuidadosos con la alimentación del gato, no podemos desatender la equivalencia de su vida con la nuestra. Cada año gatuno equivale a seis de vida humana. Un guiño que nos hace la naturaleza cuando entendemos cuándo alcanzan la madurez: a los cinco años de vida. Los treinta nuestros. ¿Será una señal?
Si son maduros a esa edad ¿cuándo se consideran abuelos? A los 10 años. Un momento en el que es importante conocer los cuidados de los gatos mayores para garantizar el bienestar en su vejez.
6. La huella dactilar del gato es su nariz
A priori, la nariz de un gato es igual a la de cualquier otro congénere de su especie. ¡Pues no! Lo cierto es que cada nariz es tan única como lo es el animal. El entramado de pliegues de la nariz gatuna es el equivalente a la huella dactilar de un humano.
7. Un gato tricolor es (casi) siempre hembra
Otra de las rarezas para conocer en el Día Internacional del Gato. Y, también, una de esas máximas de la cultura popular que se cumplen. La gran mayoría de los gatos tricolores son hembras. Es más: se estima que solo uno de cada 4.000 gatos tricolor es macho. Y, curiosamente, suelen ser estériles. Tan solo puede reproducirse uno de cada 10.000 gatos tricolores. El porqué continúa siendo un misterio.
8. Los bigotes del gato no son pelos
No te dejes llevar por las apariencias. Los bigotes del gato son, en realidad, terminaciones nerviosas. Y su utilidad es realmente increíble. No solo permiten que estos animales midan las distancias. También actúan como detectores de aromas en el aire. Una razón de peso para no cortárselos nunca.
9. Los gatos también pueden ser «candigatos» políticos
Y así lo demuestra el minino que fue alcalde honorífico de Talkeetna durante 15 años. Y es que este pueblo de apenas 800 habitantes en Alaska decidió erigir como regidor de la localidad a un vecino peludo: Stubbs, el gato de uno de los vecinos. La cosa tiene su miga porque, realmente, nunca fue elegido por los vecinos ya que, al tratarse de un municipio pequeño, no tiene gobierno propio.

Lejos de ser solo una excentricidad, la elección de Stubbs como alcalde no fue otra cosa que una maniobra publicitaria del pueblo que inspiró la mítica serie de «Doctor en Alaska». Una forma de atraer a turistas ávidos por sacarse una foto con la personalidad política más peluda de la historia. ¡Y vaya si lo lograron! Su tranquilo pueblo se vio invadido por una media de 40 personas que, cada día y durante 15 años, iban solo por conocerle.
Pero no es el único gato que ha tratado de conquistar un ayuntamiento. En 2013, otro blanco y negro llamado Morris se presentó a la alcaldía de Xalapa, un municipio en el estado mexicano de Veracruz.
En esta ocasión, la campaña eran bien distinta. Bajo el eslogan «¿Cansado de votar por ratas? ¡Vote por un gato!», su campaña no solo mostraba el descontento popular por la política local. También buscaba recaudar fondos para que la protectora de animales local pudiera continuar su labor. Por supuesto, Stubbs apoyó su campaña ¡y no es broma!
10. Son uno de los animales con mayor tasa de abandono, germen de la celebración del Día Internacional del Gato
Y, después de tantas anécdotas curiosas y divertidas, toca ponerse serios. Y no es para menos. Sobre todo en época de cría, el gato bate récords en las cifras de abandono según el estudio anual de la Fundación Affinity. Un dato que nos obliga a hacer tres reflexiones.
Por un lado, la imperiosa necesidad de la identificación con microchip. Algo que, desde la entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal, es además obligatorio. Hasta ahora, el porcentaje de gatos que se perdía año tras año supera con creces al de perros. Algo que obliga a los dueños responsables a identificarlos convenientemente para que, en caso de pérdida, puedan volver a casa.
Además de esto, es necesario entender la importancia de la castración. Un aspecto que también está determinado ahora por la legislación pero que, además, repercute en positivo en la vida de estos felinos. Se estima que pueden llegar a vivir hasta tres años más.
Y, por último, no podemos dejar la ocasión de hablar del Día Internacional del Gato para concienciar sobre la adopción. Uno de los motivos por los que se institucionalizó esta fecha que ahora celebramos. Para recordarnos que ellos también necesitan una segunda oportunidad y un primer hogar. Algo que nosotros perseguimos en nuestras Jornadas de Adopción, que se organizan de forma regular en nuestros centros.
Así que, si eres un amante de los mininos y has llegado hasta aquí, ¡no dejes de compartir este post para ayudar a descubrir un animal fascinante que necesita nuestra protección!
Entre todos, podemos lograr que el único sitio que ocupe cualquier gato sea el sofá de una casa. Un espacio que ¡no te confundas! será únicamente suyo si le haces un hueco en tu vida.







