Son una de las plantas de exterior más populares y, al mismo tiempo, desconocidas. Conocer los cuidados de las Pentas lanceolata es fundamental no solo si queremos disfrutar de una primavera y un verano coloreados por sus popularmente llamadas flores estrella. Incluso más importante es saber cómo cultivarlas una vez comienza a bajar el calor, un momento en el que esta preciosa planta necesitará más que nunca mimos y cuidados específicos.
Antes de entrar en detalle sobre qué necesitan estas generosas plantas, es fundamental saber algo. La Pentas lanceolata es una planta originaria de África oriental que crece formando una mata densa, una razón por la que es una planta perfecta si te preguntas cómo hacer un parterre en el jardín pero, también, para tener en la terraza. Puede llegar a crecer hasta 60 centímetros a lo alto e, incluso, hasta un metro a lo ancho. Pero, para evitarnos sustos, es fundamental saber qué son las plantas vivaces, categoría en la que se engloba esta belleza y motivo por el que puede desaparecer con la llegada del invierno.

Así y dado que saber a fondo sus necesidades nos ayudará a cultivarla mejor, veamos en detalle cuáles son los cuidados de las Pentas lanceolata tanto en sus meses de floración como en los de reposo.
- ¿QUÉ CUIDADOS NECESITAN LAS PENTAS LANCEOLATA SEGÚN EL MOMENTO DEL AÑO?
- 1. La luz, uno de los cuidados de las Pentas lanceolata más importantes durante todo el año
- 2. El suelo, rico en materia orgánica
- 3. La temperatura, un aspecto crucial para su bienestar
- 4. El riego, uno de los cuidados de los Pentas lanceolata que debemos hacer con precaución
- 5. La poda, una labor que ayudará a su floración
- 6. El abono, un cuidado que debemos adecuar a cada época del año
- 7. Las plagas, unos enemigos a controlar de cerca
¿QUÉ CUIDADOS NECESITAN LAS PENTAS LANCEOLATA SEGÚN EL MOMENTO DEL AÑO?
Las Pentas lanceolata son plantas que florecen, de forma generosa y constante, durante los meses de primavera y verano. Y, precisamente, es su floración el aspecto más atractivo de esta especie. En rosas, malvas, blancos, fucsias o, incluso, de color vino: sus pequeñas flores se abren en cinco pétalos que acaban en punta, motivo por el que se las llama flores estrella, son lo que hace de esta planta vivaz un auténtico espectáculo natural.
Plantadas en un clima mediterráneo o con inviernos suaves, es posible que estén en flor durante la mayor parte del año. Sin embargo, en climas más fríos comienzan a detener su floración hacia mediados del otoño. Un momento en el que comienza a haber menos horas de luz, el sol es menos intenso y, además, comenzamos a notar las bajadas de temperatura.

Será precisamente en ese momento cuando tendremos que prestar especial atención a los cuidados de las Pentas lanceolatas ya que, de cómo preparemos nuestra planta para los meses de frío, dependerá en gran medida su capacidad de resistir y volver a brotar en primavera. Es más: si vivimos en un clima frío, lo recomendable es tener estas plantas en maceta. Una forma sencilla de poder meterlas dentro de casa a la espera de que regrese la primavera.
1. La luz, uno de los cuidados de las Pentas lanceolata más importantes durante todo el año
Como buena planta de origen africano, las Pentas lanceolata necesitan una dosis de luz tanto para florecer como para vivir. Lo ideal es que tengan al menos seis horas de luz solar y siempre de forma directa. En climas muy cálidos, en meses de verano es recomendable que estén en sombra parcial en las horas centrales del día.
Durante los meses de frío y si tenemos nuestra planta dentro de casa, tendremos que colocarla en una ventana orientada al sur o al oeste para que pueda recibir la mayor cantidad de sol posible.
2. El suelo, rico en materia orgánica
Un aspecto de los cuidados de los Pentas lanceolata que debemos mimar tanto en maceta como si plantamos directamente en el suelo. Estas preciosas plantas demandan un suelo rico en materia orgánica para poder crecer, mantenerse sanas y florecer. Un buen motivo para que, en nuestra mezcla de sustrato, añadamos humus de lombriz para que tenga los nutrientes que necesita.

No es lo único que conviene añadir al sustrato. Otro aspecto fundamental para estas plantas es el drenaje, ya que no toleran los encharcamientos. Por eso y además de garantizar que cuenta con él, no está de más que la mezcla cuente con perlita.
3. La temperatura, un aspecto crucial para su bienestar
Como buenas plantas tropicales, las Pentas lanceolata son amantes del calor por lo que su rango de temperaturas ideal está entre los 20 y los 30 grados. Algo que nos da una pista sobre por qué son una de las plantas más habituales en exterior durante los meses de verano.
Por contra, no toleran bien el frío y que, en caso de ser extremo, puede acabar con ellas. Algo que podemos evitar tomando ciertas precauciones como crear un mulching sobre el sustrato y proteger nuestra planta con una manta de jardinería. Y, si nuestro clima es especialmente frío, lo ideal es que pasen el invierno dentro de casa.
4. El riego, uno de los cuidados de los Pentas lanceolata que debemos hacer con precaución
Y es fácil comprender por qué. Las Pentas lanceolata no soportan el exceso de agua pero sí necesitan estar hidratadas para poder mantenerse sanas y florecer. Por eso, en época de floración es importante regar de forma regular pero moderada. El mejor indicativo de cuándo volver a regar es comprobar si se ha secado la capa superficial del sustrato.
¿Y durante el otoño y el invierno? Sencillo. Comenzaremºos a espaciar los riegos ya que nuestra planta no tendrá tanta demanda y, además, estará comenzando una época de reposo vegetativo.
5. La poda, una labor que ayudará a su floración
Podar no es uno de los cuidados de las Pentas lanceolata que más tendrán que preocuparnos y la explicación es sencilla. Durante los meses de verano, bastará con retirar las flores marchitas para ayudar a nuestra planta a continuar floreciendo y evitar que gaste energía innecesaria en ellas. Además y si necesitamos darle forma, también podemos aplicar una poda ligera que también promoverá la floración.
¿Cómo debemos podarla el resto del año? Pues fácil: de la misma manera. Si está dentro de casa y florece, retirando las flores marchitas. Y, si cuenta con las condiciones ideales y crece deformando su aspecto, aplicando una poda ligera.
6. El abono, un cuidado que debemos adecuar a cada época del año
La fertilización es clave en los cuidados de las Pentas lanceolata, ya que promoverán la floración y ayudarán a nuestra planta a estar sana. Sin embargo, no debemos abonar de la misma manera durante todo el año ya que nuestra planta tiene necesidades diferentes en cada momento.

Durante los meses de floración, lo ideal es aplicar un abono líquido para plantas en flor que, gracias a su mayor contenido de fósforo, potenciará las tan deseadas flores. En primavera y verano, el abonado debe ser regular ya que es la época de más desgaste de nuestra planta.
Con la llegada del otoño, lo ideal es aplicar una capa de humus de lombriz que penetrará en el sustrato a medida que reguemos.
7. Las plagas, unos enemigos a controlar de cerca
Y tendremos que hacerlo durante todo el año porque las Pentas lanceolatas son el oscuro objeto de deseo de tres plagas concretas: pulgón, cochinilla y araña roja. Tres molestos visitantes que tendremos que atajar lo antes posible utilizando un insecticida específico para ellos.

Además, es conveniente saber que las Pentas lanceolatas son susceptibles de sufrir hongos como el mildiu si nos excedemos con el riego. Una enfermedad que tendremos que tratar con premura para evitar que comprometa la salud de nuestra planta.
Y ahora que sabes cuáles son los cuidados de las Pentas lanceolatas solo te queda disfrutar de ellas durante todo el año. Tanto cuando están a reventar de flor como cuando esperan, pacientemente, la llegada de la primavera.

