Cada vez está más cerca y, precisamente por eso, tenemos que estar preparados: la primavera entrará (al menos oficialmente) en nuestras vidas en un mes escaso. Un motivo más que suficiente para que comencemos a poner a punto nuestro jardín empezando por algo muy básico: definir las herramientas que necesitamos para ayudar a que nuestro espacio verde particular empiece el cambio de estación con buen pie.
Aunque parezcan secundarias, las herramientas son fundamentales porque nos permitirán hacer lo que nuestro jardín nos pida. No nos confundamos: no es preciso tener una amplia variedad de herramientas sino las que nos hacen falta para dar respuesta a nuestras necesidades. Por eso mismo, es importante plantearnos cuáles son nuestras necesidades (necesidades que estableceremos según cómo sea nuestro jardín) y evaluar cuáles son las mejores herramientas para nosotros.

Para empezar, conviene revisar el estado de palas y azadas. El uso y las inclemencias del invierno no son buenos amigos de este tipo de herramienta, por lo que ahora es un buen momento para plantearnos cambiarlas y apostar por herramientas de fibra de vidrio. No solo tienen un mantenimiento mucho más sencillo sino que, además, son más duraderas y más ligeras que las convencionales. Si disponemos de poco espacio de maceteros y macizos de plantas, la gama de herramientas que necesitamos es sencilla: solo nos hará falta un tridente (esa herramienta de tres dientes que parece un rastrillo pequeño), una pala de mano y una azada. Un auténtico trío perfecto para la jardinería de pequeños espacios y, sobre todo, para poder manipular la tierra a la hora de plantar o re plantar. Si el espacio que tenemos que trabajar es de un tamaño considerable, lo más recomendable es optar por palas de mano (más robustas y que nos facilitarán las labores de jardinería) y azadas de mayor tamaño y robustez.
El césped también necesita sus propias herramientas: ya no solo porque es ahora el momento de utilizar el rastrillo para retirar los restos del invierno (sobre todo la hoja muerta, que crea una capa sobre el césped que le impide respirar correctamente) y de comenzar a sanearlo. Un gesto que tendremos que aplicarle también a cualquier espacio o superficie de piedra que tenga muestro jardín, ya sea un suelo o un macizo de rocalla. El invierno, la humedad y el frío hacen que prolifere en estas superficies ese musgo tan característicos de las épocas de frío. Retirarlo nos permitirá sanear la piedra pero solo podremos conseguirlo correctamente de una manera: con una hidrolimpiadora. Nada como el agua a presión para retirar los restos del invierno pero incluso en esto hemos de decidir cuál tener: según la superficie que tengamos o los (otros) usos que queramos darle, habremos de elegir una de más o menos potencia.

Por último, no podemos olvidar la poda. Si el paisaje de nuestro jardín consiste en arbustos, una tijera de mano o una eléctrica serán suficiente. Sin embargo, si contamos con árboles en el jardín o setos tendremos que tener en cuenta herramientas que nos permitan podar a una altura media (como las tijeras o los serruchos de pértiga) de una manera sencilla y, sobre todo, segura.
Y si tienes alguna duda sobre qué herramientas tener para preparar tu jardín, acércate a vernos a tu centro Verdecora más cercano. Te asesoraremos sobre las herramientas necesarias para tu jardín según tus necesidades. Una buena manera de tener lo que necesitamos. Ni más ni menos.
Imágenes | Blog Decoración de Jardines, Nicolock Paving Stones a través de Glenda (Pinterest)