¿Por qué mi monstera tiene las hojas amarillas?

Es una de las especies de cabecera para amantes de las plantas de interior. Algo perfectamente lógico si tenemos en cuenta que, además de su belleza, hablamos de una planta con un crecimiento simplemente espectacular. Por todo ello es perfectamente normal alarmarse cuando nuestra monstera tiene las hojas amarillas. Una auténtica señal de alarma de que estamos cometiendo algún error en su cultivo.

Antes de asustarnos más de la cuenta, es importante saber algo. Detectar que una monstera tiene las hojas amarillas no es sinónimo de que la salud de la planta esté comprometida. En realidad, esta coloración tan llamativa es únicamente una llamada de atención para que revisemos a fondo qué cuidados de la monstera o Costilla de Adán no estamos cumpliendo correctamente. Porque, por más espectacular que sea ver a nuestra planta así, lo más importante es tomar conciencia de que podemos solucionarlo.

¿Y cómo hacerlo? Sabiendo qué puede estar sucediéndole a nuestra monstera. Una auténtica clave para tomar cartas en el asunto y seguir disfrutando, así, de sus características hojas intensamente verdes.

7 RAZONES POR LAS QUE LA MONSTERA TIENE LAS HOJAS AMARILLAS

Como sucede con las hojas amarillas del geranio, una monstera con hojas amarillas no responde a un único motivo. Detectar este cambio de coloración nos obliga, en realidad, a evaluar distintos aspectos de su cultivo antes de saber exactamente qué puede estar sucediéndole. Pero antes de más, hay que tener algo claro. Al igual que otras plantas, la monstera en ocasiones amarillea sus hojas más viejas como parte de su ciclo natural. Si este es el caso de nuestra planta, podemos estar tranquilos: .solo está siguiendo su curso vegetativo.

Pero ¿qué sucede cuando esa coloración no responde a hojas viejas? Veamos a qué puede deberse, y cómo actuar.

1. Un riego inadecuado, uno de los motivos más habituales por los que la monstera tiene las hojas amarillas

Es, sin lugar a dudas, el motivo más común para que nuestra preciosa planta presente este problema. Solemos creer que, por sus orígenes tropicales, la monstera demanda una buena pauta de riego. Si bien es cierto que no tolera la sequía extrema, no nos confundamos: lleva bastante peor los encharcamientos.

Por eso no solo es importante hacerle un buen drenaje a nuestra planta sino que, añadido, será fundamental usar un sustrato para plantas verdes. La razón es sencilla: este tipo de sustrato está diseñado para favorecer la aireación de las raíces. Un auténtico aliado para situaciones de exceso de agua.

Indagar por qué nuestra monstera tiene las hojas amarillas comienza con revisar su riego. La mejor manera de hacerlo es tocando el sustrato. Si introducimos un dedo y está seco, es probable que nuestra planta esté pasando sed. Si por el contrario está demasiado húmedo o vemos que el agua no drena correctamente, es más que probable que las hojas amarillas de la monstera nos indiquen un encharcamiento.

Cómo diferenciar si el exceso o el defecto de riego propicia que la monstera tenga hojas amarillas

Pero ¿cómo diferenciarlo? Sabiendo cuáles son las hojas que cambian de color según cada escenario. Cuando la planta está sufriendo sequía, este cambio de color suele darse en el borde de las hojas junto con el marrón. Si está sometida a un exceso de agua, serán las hojas inferiores y nuevas las que se coloreen de amarillo. Si este es nuestro caso, no solo tendremos que regar con menor intensidad.

Además, tendremos que contemplar un par de cuidados más. Por un lado, evitar dejar el plato inferior con agua después de cada riego. Por otro, revisar si el drenaje cumple correctamente con su función y, de no ser así, solucionarlo lo antes posible.

2. Un grado insuficiente de humedad ambiental, otra razón para este cambio de coloración

Recordemos: la Costilla de Adán es una planta de orígenes tropicales. Y, aunque eso no sea especialmente significativo en lo que respecta al riego, sí lo es en su demanda de humedad ambiental. Para estar sana y mantener el vigor de su característico verde, la monstera necesita cierta humedad en el espacio en el que está. Cuando ésta no se da, puede manifestarse cambiando la coloración de sus hojas.

Si vivimos en un clima húmedo, es probable que este no sea el motivo de las hojas amarillas de la monstera. Sin embargo, si vivimos en un clima seco o en los meses de calefacción, tendremos que crearle alrededor esa humedad tan necesaria. Conseguir esto puede hacerse de distintas maneras. Podemos optar por el uso de un humidificador, agruparla con otras plantas para conseguir que tenga más humedad o, por último, crearle esa atmósfera húmeda con el tradicional plato con guijarros y agua.

3. Un defecto en la iluminación, otro aspecto a revisar

A la monstera le gusta la luz abundante e indirecta. Y, si bien es cierto que puede vivir en espacios menos iluminados, eso puede pasarle factura en la coloración de sus hojas. Una de las formas de manifestar esta falta de luz es haciendo palidecer su verde característico pero, también, coloreando de amarillo sus hojas.

Ojo: si la planta está expuesta a sol directo, las hojas también pueden volverse amarillas. En este caso, el cambio de coloración suele ir acompañado de un tono marrón.

4. Un trasplante inadecuado, motivo por el que la monstera tiene las hojas amarillas

Es, probablemente, la razón más sencilla de identificar. Si después de trasplantarla nuestra monstera comienza a presentar este tipo de hojas, es que algo ha fallado durante la tarea.

Más allá de pasar revista a cómo trasplantar una planta correctamente, tendremos que valorar otros aspectos fundamentales. Quizás no era el momento ideal para una labor así, quizás no hemos provisto a nuestra planta del drenaje correcto o, en muchas ocasiones, no hemos acertado con el tipo de sustrato. La aparición de estas hojas amarillas no es más que una forma de decirnos que ha sufrido un shock por trasplante.

Si este es nuestro caso, lamentablemente no podremos volver a trasplantarla por el momento ya que no hará más que incrementar su estrés. Solo podemos cuidar de ella para que vaya retomando, poco a poco, la normalidad. Si tiene mal drenaje, haciéndole más agujeros a la maceta. Si la hemos sometido a un cambio de lugar, colocándola nuevamente en el original.

5. Una problema en el abonado, ya sea por defecto o por exceso

Es otra de las razones sencillas de identificar. Si nuestra planta lleva tiempo con nosotros y no la hemos abonado, es más que probable que la aparición de estas hojas sea una petición a gritos de nutrientes. Solucionarlo es sencillo: basta con mantener una pauta regular de abono para plantas verdes diluido en el agua de riego.

Pero cuidado, porque podemos vernos en otro escenario. Nos referimos a haber abonado nuestra planta ya y, aún así, detectar hojas amarillas y de aspecto enfermizo. Si ese es nuestro caso, podemos habernos excedido en la pauta de fertilización de la planta. De ser así, tendremos que suspender el abonado durante al menos tres meses y, si la planta tiene buen estado general, plantarnos un trasplante para renovar el suelo.

6. Una oscilación brusca en las temperaturas o frío, otro de los clásicos

Como buena planta tropical, la monstera no tolera demasiado bien los cambios de temperatura. Es más: uno de sus principales enemigos son las corrientes de aire. Algo que, aunque pueda parecernos poco importante, también es motivo de que las hojas se pongan amarillas. Pero las hojas amarillas en la monstera también puede darse por otro motivo: estar expuesta a menos de 15 grados.

Si detectamos que este es, precisamente, el problema de nuestra planta lo ideal es buscarle otra ubicación más confortable.

7. Un problema de plagas, el último de los cuidados a revisar

No cabe duda: la presencia de plagas también es responsable de que la monstera tenga las hojas amarillas. Por eso y descartados todos los motivos anteriores, es importante ver si nuestra planta está sufriendo el ataque de ácaros y áfidos.

La solución: frenar cuanto antes la invasión con un insecticida.

CÓMO SE MANIFIESTAN LAS HOJAS AMARILLAS EN LA MONSTERA SEGÚN EL PROBLEMA

Más allá de conocer la razón por la que una monstera tiene las hojas amarillas, también hemos de tener en cuenta cómo lo hace para guiarnos en la solución. Y es que la situación de las hojas e, incluso, el estado de las mismas nos da una pista excepcional para saber qué debemos hacer.

1. Las hojas amarillas están salpicadas en la planta, especialmente en la zona baja, y el sustrato está normal

No hay por qué preocuparse. Son, simplemente, hojas que han cumplido su ciclo natural.

2. Hojas amarillas inferiores y sustrato húmedo

Son indicativo de que nuestra monstera ha sufrido un exceso de riego y, además, es posible que no esté recibiendo la luz que necesita.

3. Las hojas amarillas se dan en toda la monstera y el sustrato está seco

Es un síntoma evidente de que nuestra planta está pasando sed.

4. Las hojas amarillas se distribuyen por la planta y el suelo es normal

Puede responder a una falta de iluminación, pero también, de nutrientes. Revisa cuándo fue la última vez que la trasplantaste o, incluso, la abonaste.

Y ahora que sabes por qué tu monstera tiene las hojas amarillas, solo te quedan dos cosas por hacer. Primero, ponerle solución. Y segundo y más importante, seguir disfrutando de su increíble belleza.