Con la llegada de la primavera, es momento de conocer a fondo los tipos de antiparasitarios para gatos. Algo que solemos dejar en un segundo plano, ya que suelen ser los canes quienes acaparan todas las miradas. La primavera es sinónimo de buen tiempo y de resurgir de la naturaleza. Pero no podemos quedarnos solo en la superficie, porque ese buen tiempo no son solo flores. También es el momento en el que esos insectos enemigos del bienestar de nuestros animales reaparecen. Un motivo para estar atentos y tratar de protegerles lo máximo posible.
Igual que conocemos las ventajas de los distintos tipos de antiparasitarios para perros, toca hacer lo mismo con los tipos de antiparasitarios para gatos. Y, aunque en primavera es fundamental, no podemos olvidar un par de aspectos importantes. Por un lado, que la desparasitación es un cuidado a realizar durante todo el año. Por otro, que debe aplicarse tanto a gatos completamente domésticos como a aquellos que salen de casa.
Pero más allá de hacerlo únicamente por nuestro animal, hay algo más a contemplar. Del bienestar de nuestro gato depende también el nuestro. Porque muchos de esos insectos que les afectan y comprometen su salud también pueden complicar la nuestra.
- TIPOS DE ANTIPARASITARIOS PARA GATOS: CUÁL ELEGIR
- 1. Pipetas, uno de los tipos de antiparasitarios para gatos con mayor cobertura
- 2. Collares, una alternativa con mayor duración en el tiempo
- 3. Sprays antiparasitarios, solo como tratamiento de choque
- ¿QUÉ ENFERMEDADES PREVIENEN LOS DISTINTOS TIPOS DE ANTIPARASITARIOS PARA GATOS?
- ¿Qué debemos combatir con los distintos tipos de antiparasitarios para gatos?
TIPOS DE ANTIPARASITARIOS PARA GATOS: CUÁL ELEGIR
Cuando hablamos de desparasitar a nuestro gato, hay que tener en cuenta que hemos de hacerlo de manera externa e interna. Habitualmente, somos rigurosos con la primera pero, para proteger realmente a nuestro animal, hemos de serlo también con la segunda. La desparasitación interna busca fundamentalmente eliminar gusanos intestinales, y solo puede ser realizada bajo supervisión veterinaria.

Además de esto, hay un aspecto muy importante a contemplar. Y no es otro que saber cuál es la cobertura específica de cada producto. Aunque en líneas generales todos tienen coberturas similares en lo que a plagas se refiere, hay algunos puntos a tener en cuenta. Para empezar, que tengan carácter antiparasitario y no solo repelente. Y la razón es sencilla. Mientras los primeros presentan una protección de nuestro animal, los segundos únicamente molestan a los insectos que pueden atacar su organismo. Es más: en todo caso, lo ideal es conjugar un producto antiparasitario con otro repelente para conseguir una mayor protección.
Otro aspecto a contemplar es la efectividad en el tiempo de cada uno de los tipos de antiparasitarios para gatos. Y decimos esto porque, a menos que seamos sumamente rigurosos con el calendario, lo ideal es que elijamos el antiparasitario con más duración.
Y por último, un consejo: nada de aplicar a un gato un antiparasitario para perro ya que puede resultar mortal para el animal. Los compuestos empleados para perro y gato son diferentes, como lo es el sistema endocrino de cada uno de ellos.
Más allá de esto, veamos los tipos de antiparasitarios para gatos a nuestra disposición y cuáles son sus ventajas:
1. Pipetas, uno de los tipos de antiparasitarios para gatos con mayor cobertura
De entre todos los tipos de antiparasitarios, las pipetas son las únicas que permiten desparasitar a nuestro animal de manera interna y externa simultáneamente. Su aplicación es sumamente sencilla, y se realiza sobre la piel del gato habiendo retirado el pelo.

El único inconveniente es que su efectividad es más corta: protegen a nuestro gato entre dos y cuatro meses según el tipo de producto.
2. Collares, una alternativa con mayor duración en el tiempo
Solo tienen aplicación externa. Su principal ventaja es que presentan coberturas de entre tres y ocho meses.

Y no te preocupes: aunque tu gato salga a la calle, el collar sigue siendo una buena idea. Están diseñados de manera que se pueden abrir en caso de que el animal se lo enganche en alguna parte.
3. Sprays antiparasitarios, solo como tratamiento de choque
Son uno de los tipos de antiparasitarios para gatos que nos permitirán frenar una infección. Su principal misión es atajar la plaga. También es útil en gatos de corta edad.
¿QUÉ ENFERMEDADES PREVIENEN LOS DISTINTOS TIPOS DE ANTIPARASITARIOS PARA GATOS?
Tan importante como elegir entre los distintos tipos de antiparasitarios para gatos es saber cuáles son los parásitos que pueden afectarles. Es cierto que sufren menos amenazas que los perros, pero eso no es sinónimo de quitarle importancia a ninguno de ellos. Y, como decíamos, no solo por la repercusión que puedan tener en su salud. También porque hay algunas dolencias, como la enfermedad de la uña de gato, que nos pueden afectar a los humanos como consecuencia de una incorrecta desparasitación de nuestro animal.
Así que tan importante como conocer los distintos tipos de antiparasitarios para gatos es saber contra qué tenemos que protegerlos, y cuáles son sus efectos en la salud de nuestro minino.
¿Qué debemos combatir con los distintos tipos de antiparasitarios para gatos?
Habitualmente, las plagas más comunes en los gatos son pulgas y garrapatas. Y, aunque creamos que lo más complicado que traen consigo son dermatitis, nada más lejos de la realidad. Solemos temer los efectos secundarios de las garrapatas pero desconocemos por completo que las pulgas también tienen lo suyo. Su presencia en el cuerpo de nuestro animal puede desembocar en un buen número de dolencias peligrosas para su salud.
Comprender su magnitud pasa por conocer estas enfermedades mínimamente, y nada como saber cuáles pueden ser para identificar sus síntomas:
- Anemia infecciosa felina: provocada por pulgas y garrapatas. También puede darse con motivo de peleas o mordiscos de otros gatos enfermos. Sus principales síntomas son disminución del apetito, tristeza, pérdida de peso y fiebre. Suele ir acompañado de una pérdida de coloración en nariz, fondo de ojo y encías. Dado que puede llegar a ser mortal en animales inmunodeprimidos o en gatos mayores, hemos de acudir al veterinario ante cualquier síntoma
- Dipilidiosis: provocada por las larvas de pulgas que éstas depositan en el pelo de nuestro animal. Teniendo en cuenta que uno de los cuidados para gatos básicos es lamerse el pelaje, las larvas pasan a formar parte de su organismo y crecen como gusanos en el intestino. Además de manifestarse con una pérdida de peso o diarreas, hay un comportamiento del gato que nos ayudará a identificarlos: se rascará los cuartos traseros contra el suelo para aliviar el picor. En caso de detectarlo, hay que acudir al veterinario
- Filariosis: no es de las más habituales en gatos, pero también puede darse. Está provocada por mosquitos. En estado larvario, se instalan en el corazón y acaban afectando al funcionamiento de las válvulas. Detectar la presencia en el organismo de nuestro gato puede tardar demasiado tiempo, por lo que ante el mínimo síntoma hemos de acudir al veterinario. Los más habituales son falta de apetito, decaimiento, hemorragias nasales y problemas respiratorios
Y tú ¿qué tipos de antiparasitarios para gatos utilizas con el tuyo?



