Solemos escuchar el nombre e, incluso, tener identificadas a un buen número de plantas ácidas sin comprender a fondo cuál es el significado de esa categoría. Por ello conocer a fondo los cuidados de las plantas acidófilas es fundamental. Solo así podremos no solo conocer sus singularidades sino, especialmente, entender qué necesidades especiales tienen. Algo que conviene conocer antes, incluso, de adquirir plantas.
Aunque se suele pensar que las plantas ácidas hacen referencia a unas pocas especies vegetales, de entre las que la Azalea y la Hortensia son las más conocidas, la realidad es bien distinta. En esta categoría se engloban múltiples plantas que solemos tener tanto dentro como fuera de casa que, en muchos casos, comparten una singularidad: son originarias del continente asiático y, especialmente, de países como China y Japón.

Por eso y tan importante como saber a fondo qué son las plantas ácidas es momento de comprender sus características y, sobre todo, sus demandas.
- ¿CUÁLES SON LAS CARACTERÍSTICAS DE LAS PLANTAS ACIDÓFILAS?
- 5 CUIDADOS DE LAS PLANTAS ACIDÓFILAS FUNDAMENTALES PARA SU BIENESTAR
- 1. Revisar el pH específico del suelo y conocer cómo es la acidez que demanda cada planta
- 2. El tipo de agua, uno de los cuidados de las plantas acidófilas que resulta crucial
- 3. Un riego regular y un drenaje eficaz, fundamentales
- 4. El tipo de ubicación, algo que también debemos contemplar
- 5. El abonado, siempre con un abono específico para acidófilas
¿CUÁLES SON LAS CARACTERÍSTICAS DE LAS PLANTAS ACIDÓFILAS?
La principal característica de las plantas acidófilas es que tienen unas necesidades muy concretas en lo que respecta a los suelos en los que crecen. Una particularidad que, en realidad, da nombre a la categoría de plantas ya que, como su nombre indica, necesitan un suelo ácido. ¿Qué significa esto? Que tiene un pH muy definido siempre inferior a 7, aunque la gran mayoría están entre 4,5 y 6,5.
Lejos de ser un capricho, este detalle es una auténtica necesidad. Solo en estas condiciones las plantas acidófilas pueden extraer eficazmente los nutrientes que necesitan, fundamentalmente hierro y manganeso. Dos fundamentales para florecer o dar fruto, si se trata de plantas de huerto o frutales, pero también para su supervivencia.

En el caso concreto del hierro, es el encargado de que las plantas ácidas puedan mantener las hojas verdes. Y aunque podríamos pensar que es una cuestión estética, esta coloración es uno de los signos de enfermedad en las plantas. El amarillo solo nos está avisando de que necesita hierro y que, en caso de que no se lo demos, morirá.
Además de esto, otra de las características de las plantas acidófilas es que necesitan un clima húmedo constante todo el año. Un buen motivo por el que este tipo de plantas son tan populares en toda la cornisa cantábrica.
5 CUIDADOS DE LAS PLANTAS ACIDÓFILAS FUNDAMENTALES PARA SU BIENESTAR
Teniendo en cuenta lo anterior, el punto de partida de los cuidados de las plantas acidófilas es siempre el suelo. Un motivo de peso para mimarlo, especialmente si el destino de nuestras plantas ácidas es una maceta.

Pero al margen de esto y por esta singularidad, hay otros detalles comunes a prácticamente todas las plantas ácidas que debemos tener en consideración y que, como los anteriores, son fundamentales para su correcto crecimiento.
1. Revisar el pH específico del suelo y conocer cómo es la acidez que demanda cada planta
Y esto es sumamente importante comprenderlo ya que es, en sí mismo, uno de los cuidados de las plantas acidófilas que debemos tener en cuenta.

Seguro que en alguna ocasión, leyendo sobre consejos de cultivo de una especie determinada, hemos visto la coletilla de «prefiere suelos ligeramente ácidos». Esto es porque no todas las plantas ácidas necesitan el mismo tipo de acidez en el suelo. Mientras para algunas tiene que ser moderada, para otras es fundamental que sea mucho mayor. Y, nuevamente, esto incide en cómo florece o dar fruto una planta.
¿Cómo saber si el suelo tiene el pH que necesitamos? Utilizando un medidor de pH. La mejor forma de salir de dudas y, en un momento dado, poder ajustarlo a las necesidades de cada planta.
2. El tipo de agua, uno de los cuidados de las plantas acidófilas que resulta crucial
De nada nos sirve si mimamos el sustrato de estas plantas si cometemos el error de regarlas con agua del grifo. ¿Y por qué no es una buena idea? Porque el agua potable suele tener un alto contenido en cal, una sustancia alcalina que elimina la acidez.
Para regar correctamente plantas acidófilas lo ideal es utilizar aguas ácidas, como el agua de lluvia, o, si no podemos recogerla, agua destilada o un agua mineral baja en cal.
3. Un riego regular y un drenaje eficaz, fundamentales
Como decíamos antes, la gran mayoría de ellas proceden de climas húmedos. Por eso una parte sumamente importante de los cuidados de las plantas acidófilas es que mantengan el sustrato siempre mínimamente húmedo. Por eso y especialmente en meses de verano, es fundamental regar de forma regular para que nuestras plantas ácidas no noten sequía en sus raíces.
Casi tan importante como esto es procurarles un drenaje excelente. Les encanta la humedad y la necesitan, cierto. Pero no toleran los encharcamientos.
4. El tipo de ubicación, algo que también debemos contemplar
Salvo honrosas excepciones como es el caso del arándano, las plantas ácidas no son amantes del sol directo. Es más: si echamos un vistazo a las necesidades de los arbustos de sombra, nos sorprenderá comprobar que la mayoría de ellos responden a la categoría de plantas acidófilas.

Por eso y salvo que revisando las necesidades de la planta tenga otras distintas, lo ideal es colocar nuestras plantas acidófilas en una zona de sombra en la que reciban la luz que demandan pero siempre de forma indirecta.
5. El abonado, siempre con un abono específico para acidófilas
Otro de los cuidados de las plantas acidófilas que no podemos pasar por alto, y en el que no solemos reparar. A este tipo de plantas no les sirve cualquier fertilizante sino que demandan un abono específico que no solo cuente con quelato de hierro sino, también, con todos los nutrientes que precisan.

No solo eso: además, los abonos para plantas ácidas también ayudan a mantener la acidez del suelo al depositar en él todos los nutrientes que precisan.
Y ahora que conoces los cuidados de las plantas acidófilas ¡no se te resistirá ninguna!
