Las colonias para perros son, sin lugar a dudas, uno de los accesorios para perro que más dudas despiertan entre los dueños. Un complemento que, en muchas ocasiones, entendemos como secundario pero que pueden ser de gran ayuda en la higiene de nuestro can. En líneas generales y cuando hablamos de perfumes, no los identificamos como una necesidad canina. Sin embargo, hay muchas y poderosas razones para plantearnos incluir las colonias para perros en nuestra vida.
Aunque parezcan unas recién llegadas, las colonias para perros llevan mucho tiempo entre nosotros. Se estima que hace aproximadamente 20 años que forman parte de los imprescindibles en el mundo canino, aunque es cierto que hasta hace apenas unos años no se ha generalizado su uso. Algo que responde, en gran medida, a que su utilización continúa despertando sentimientos encontrados entre muchos dueños responsables que no acaban de saber si son recomendadas para sus animales.
Así que descubramos qué implica utilizar colonias para perros y, lo que es más importante, si son recomendables o no para el nuestro.
- EL OLOR CANINO, EL PUNTO DE PARTIDA
- ENTONCES ¿USAMOS O NO COLONIAS PARA PERROS?
- 1. Elegir siempre colonias para perros específicas para ellos, fundamental
- 2. Usarla en cantidades moderadas y en zonas estratégicas
- 3. Aplicarla en zonas estratégicas
- 4. Adecuar la colonia a la edad del animal
- 5. Observar el comportamiento de nuestro animal cuando usemos colonias para perros
EL OLOR CANINO, EL PUNTO DE PARTIDA
Empecemos por algo que debemos considerar. Como todos los animales, los perros tienen un olor muy característico que, en ocasiones, puede llegar a ser molesto para el olfato humano. No hablamos, únicamente, del mal olor que desprende el pelo mojado: hay muchas otras ocasiones en las que nuestro can puede oler de forma desagradable.
En ese tipo de situaciones, lo más habitual es que optemos por poner a remojo a nuestro animal para subsanarlo. Sin embargo, no perdamos de vista que es sumamente importante saber cada cuánto se baña un perro. Una tarea que no podemos realizar de forma regular, si no queremos alterar el manto natural de nuestro animal con todo lo que eso supone. En ese tipo de casos, las colonias para perros pueden ayudarnos a alargar esos tiempos necesarios entre baño y baño.
Añadido, hay otro detalle que no podemos perder de vista. Lo que para nosotros es un olor poco agradable, puede ser fundamental para nuestro animal. El olfato es, precisamente, uno de los sentidos más desarrollados en los perros. Su capacidad de oler supera en un millón de veces a la de la nariz humana más entrenada. Por eso, un exceso de aromas en el ambiente puede ser un motivo de estrés para estos animales. Y no hablamos de escenarios excepcionales, sino de muchos sumamente domésticos como el uso de limpiadores o de ambientadores.

Y llegamos al último punto a considerar en lo que respecta al olfato perruno. El olor propio de cada animal forma parte de la socialización del perro con otros congéneres. No hay más que reparar en ese gesto tan característico y propio de estos animales de oler a otros al encontrarlos o conocerlos. Un motivo que debemos tener en cuenta porque, lejos de ser solamente un comportamiento, es clave en la salud emocional de nuestro animal.
ENTONCES ¿USAMOS O NO COLONIAS PARA PERROS?
La respuesta es sí. Podemos perfumar a nuestro peludo, pero es importante tener en cuenta algunas consideraciones. Unas fundamentales tanto para que la colonia cumpla con su función higienizante, como para evitar que pueda ser perjudicial para nuestro amigo.
1. Elegir siempre colonias para perros específicas para ellos, fundamental
Puede parecer una tontería, pero no lo es. Para perfumar a un can no vale cualquier colonia, sino que tiene ser una específicamente diseñada para ellos. Y no solo porque hacerlo sea parte de cómo cuidar el pelo de un perro correctamente. Añadido, los productos específicos para perro cuentan con una composición que es respetuosa con la estructura de su piel. Un detalle fundamental para velar por su salud.
Si, además, optamos por fórmulas libres de parabenos y siliconas todavía mejor. La ausencia de estos compuestos estará favoreciendo que la composición microbiana del pelo canino no se vea alterada.

2. Usarla en cantidades moderadas y en zonas estratégicas
Olvidémonos de la pauta que usamos con nosotros mismos. Para evitar alterar el olor de nuestro animal con todo lo que ya hemos visto que supone, es importante que administremos la colonia para perros de forma sumamente moderada. ¿Qué significa esto? Que bastará con unas gotas.
3. Aplicarla en zonas estratégicas
Otro detalle tan importante como la cantidad es saber en qué zonas del cuerpo de nuestro animal debemos aplicar la colonia.
Lo ideal es centrarnos en las partes que, por cuestiones hormonales o de comportamiento, huelen con más intensidad. Detrás de las orejas, en la base de la cola y, como mucho, ligeramente en el lomo.
4. Adecuar la colonia a la edad del animal
De la misma forma que mimamos la alimentación en cada etapa, es recomendable hacer lo mismo en lo que respecta a este cosmético. Si tenemos un pequeñajo, lo ideal es siempre optar por colonias para cachorros de perros. No solo su composición es específica sino que, incluso, la gama de aromas es mucho más sutil precisamente para evitar confusiones en lo que respecta a su olfato.

5. Observar el comportamiento de nuestro animal cuando usemos colonias para perros
Es sumamente importante y clave para saber si nuestro animal tolera o no este tipo de complemento de su higiene. Si después de aplicar su perfume vemos que nuestro perro tiene un comportamiento diferente en los paseos o en contacto con otros animales, tendremos que analizar si puede responder a la aplicación de colonia o, incluso, a la cantidad que hemos utilizado.
Y tú, ¿estás a favor o en contra de utilizar colonias para perros? ¡Cuéntanoslo!

